Con Halloween a la vuelta de la esquina, los niños pronto saldrán a caminar disfrazados mediante despliegues festivos en busca de dulces. Sin embargo, más que fantasmas podrían estar al acecho entre la diversión de mediados de otoño, ya que los disfraces y decoraciones de Halloween presentan una serie de riesgos de incendio ocultos. Afortunadamente, al seguir algunas simples precauciones de seguridad de la Asociación Nacional de Protección contra Incendios (NFPA), puede garantizar un día de diversión segura para su familia y amigos.

Los niños vestidos con disfraces corren emocionados de puerta en puerta para pedir dulces, decoraciones festivas como calabazas brillantes, fantasmas de papel y tallos de maíz secos que adornan los pórticos: estas son algunas de las características distintivas clásicas de Halloween que hacen que la fiesta sea especial para niños y adultos por igual.

Su capacidad para salir de su hogar durante un incendio depende de la previa advertencia de las alarmas de humo y la planificación anticipada.

El fuego puede extenderse rápidamente a través de su hogar, dejándole tan solo uno o dos minutos para escapar de manera segura una vez que suena la alarma de incendios. Una puerta cerrada puede retrasar la propagación del humo, el calor y el fuego. Instale detectores de humo en cada habitación para dormir y fuera de cada área separada para dormir. Instale alarmas en cada nivel de la casa. Reúna a todos en su hogar y haga un plan. Camine por su casa e inspeccione todas las salidas posibles y las rutas de escape. Los hogares con niños deben considerar dibujar un plano de su casa, marcando dos vías para salir de cada habitación, incluyendo ventanas y puertas.